Rendimos hoy homenaje poético al poeta “civilizador” por antonomasia de México, Alfonso Reyes, titán en la lucha contra la ignorancia y adalid de le educación de su pueblo. Abogó siempre por la “enseñanzas prácticas de la felicidad”, que se traducen en saber elegir bien a los amigos y a los libros, en desear lo posible, en aceptar lo inevitable, en amar lo que hacemos siempre y en vencer siempre al miedo que sin causa nos atenace.

Así definía Reyes la virtud adquirida por la autoformación y por una eficaz combinación de un movimiento vital impulsado por las alas del aire (que nos elevan al cielo del espíritu) y los pies de plomo (que nos ayudan a aprender y comprehender la realidad). La combinación adecuada de la libertad individual y la igualdad social.

En esta tarea de humanización que a Reyes ocupó durante toda su vida, hubo un lugar eminente para la poesía y para los ríos y  como muestra de ello dejamos aquí un poema perteneciente a su obra  “Romances del río de enero”, uno de los once romances que Alfonso escribió durante su estancia en la década de los 30 en Río de Janeiro, como embajador de México en Brasil

 

Lorenzo Correa

Visita nuestro rincón de la poesía.

¡ Síguenos en las redes sociales !

   

¿Te interesa la gestión del agua desde la perspectiva del coaching?

Ponte en contacto con nosotros para más información sobre la participación de Lorenzo Correa en charlas, conferencias, formaciones o debates a nivel internacional.